A unos pasos del emblemático faro de Porto Pi, y no muy lejos del conocido Palacio de Marivent y sus jardines, se encuentra este museo perfecto para visitar en familia. Ubicado en el que fue un antiguo fuerte de defensa de Palma, el Castillo de San Carlos acoge piezas bélicas y militares que van desde la edad medida hasta el siglo XX.
Destacan, en su exterior y visibles desde la bahía, sus baterías de cañones utilizados durante la Guerra Civil Española. Una visita diferente y menos conocida pensada para viajeros que van más allá de lo evidente.