En el año 2006, el Puente Bizkaia es declarado por la UNESCO Monumento Patrimonio de la Humanidad.
El Puente ensalza la espectacular grandeza del estuario, constituye una excepcional expresión de la creatividad técnica y ejemplifica la relación satisfactoria entre función y forma. Es una de las construcciones más sobresalientes de la Revolución Industrial Europea. Y representa uno de los mayores logros de la ingeniería de finales del siglo XIX.
Fue el primer Puente colgante-transbordador del mundo y uno de los pocos que sigue en funcionamiento. La obra, diseñada en el año 1887 por Alberto de Palacio, fue inaugurada el 28 de julio de 1893. Sintetiza a la perfección la unión de la arquitectura y la funcionalidad; lo bello y lo útil; la grandiosidad y la cotidianidad.
El Puente Vizcaya, conocido popularmente con los nombres de: Puente Colgante y Puente de Portugalete, solucionó el problema de comunicación que existía entre las dos márgenes de la Ría del Nervión, sin interrumpir el cauce fluvial ni la navegación. Sus cuatro torres de celosía metálica, de 62 metros de altura, sostienen un tablero de 160 metros de longitud.
El original fue destruido tras un bombardeo en La Guerra Civil y fue reconstruido en el año 1941.
La barquilla, plataforma móvil suspendida sobre la Ría, se mueve horizontalmente entre las dos orillas, transportando personas y vehículos, durante las 24 horas del día.
Existe la posibilidad de recorrer el Puente Colgante sobre la Pasarela peatonal. ¡A unos 60 metros de altura! Desde arriba, podemos disfrutar de sus maravillosas vistas panorámicas.
El puente es, ante todo, un símbolo. Es punto culminante de una larga tradición cultural vinculada a la elaboración y utilización del hierro vizcaíno, principal motor del desarrollo de la economía vasca. El Puente Colgante es una maravilla de la ingeniería de su tiempo. Y es testigo de excepción de la historia de la Ría, de sus pueblos y de sus gentes.
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Accesibilidad:
La barquilla del Puente Bizkaia es accesible para todo tipo de personas, pero la pasarela superior no. Las canceladoras anchas (para sillas de ruedas y carritos de bebé) están situadas en el lado interior, el más alejado del mar.
Ambos lados del puente disponen de ascensor (de entrada estrecha) y los accesos son similares. En ocasiones, según público, sólo está disponible el ascensor del lado de Getxo. Para llegar a los ascensores hay que subir primero a una plataforma por unas escaleras (16 + 1) y de ahí, por una pasarela de 60 centímetros de ancho y otras escaleras (3+ 6 + 6) se llega al ascensor. Las escaleras tienen barandillas tal y como se aprecia en las fotos.
Una vez arriba, se sale a una plataforma lisa separada de la pasarela por un escalón de 20 - 25 cm. El suelo de la pasarela es de travesaños de madera con huecos.
En la parte central de la pasarela hay unos soportes de hierro y está dividida en tres tramos con dos zonas más anchas a modo de mirador. En toda la pasarela hay diversos paneles explicativos y en concreto, a ambos lados y de forma alterna, hay algunos que incluyen información en braille.
No hay ningún banco ni murete para descansar.
A nivel del suelo, las personas con discapacidad visual que deseen conocer la estructura del puente tienen a su disposición una maqueta háptica en la tienda de la entrada al puente por el lado de Portugalete. Basta con consultar al personal de la tienda, que amablemente la mostrarán.